miércoles, 31 de octubre de 2007

Predica 21/10/2007

Un corazón como el suyo

Por: Diego Diaz

¿ Que tal si por un día Jesús se convierte en Ud.?

¿ Que tal si por un día y una noche, Jesús viviera la vida suya con el corazón de El.?

¿Como lo notarían aquellos que nos conocen?

Deténgase y piense en sus horarios, obligaciones, citas, compromisos. Con Jesús apoderándose de su corazón ¿Cambiaria alguna cosa?

Ajustemos el lente de nuestra imaginación hasta tener un claro cuadro de Jesús guiando mi vida. Ahora detenga su imaginación.¿ Lo que Ud.ve es lo que Dios quiere.?

El quiere que veas, pienses y actúes como Jesús. (Filipenses 2:5)

Dios quiere que seas como Jesús, que tengas un corazón como el de El.

Dios te ama tal cual sos pero se rehúsa a dejarte así. El quiere que vos seas como Jesús.

Dios nos ama tal cual somos aunque hagamos lo Bueno o en ocasiones lo malo. Digo en ocasiones porque somos: “Santos que ocasionalmente pecamos y no pecadores que ocasionalmente andan en santidad.”

A la hora de analizar no confundamos el amor de Dios con el cariño de la gente. El amor de Dios no cesa.

Aunque lo desechemos, lo ignoremos, lo menospreciemos, le desobedezcamos. El no cambia.

Nuestro mal no puede disminuir su amor. Dios te ama tal cual sos pero se rehúsa a dejarte así. Dice su Palabra: aquel que la buena obra empezó será fiel en terminarla.

Quiero darte una buena noticia. No estas condenado con tu personalidad actual.
“No estas condenado al reino de los gruñones” Vos sos una persona amable.
Aun cuando te hallas afanado todos los días de tu vida, no necesitas afanarte el rersto de tu vida.
Si naciste intolerante no tenes porque morir siéndolo.

Jesús puede cambiar nuestro corazón. El quiere que tengamos un corazón como el de El.

Ahora veremos como era su corazón:

Su corazón fue puro. Miles lo adoraban, sin embargo estaba contento con su vida sencilla.

Había mujeres que lo atendían (LC.8:1-3) y Jamás se lo acuso de pensamientos lujuriosos.

Su propia creación lo desprecio, pero voluntariamente los perdono, e incluso antes de que pidieran misericordia.

Pedro quien lo acompaño por tres años y medio a Jesús. Lo describe como un “cordero sin mancha y sin contaminación”. (1Pedro 1:19)

Después de pasar el mismo tiempo con Jesús, Juan concluyo “no hay pecado en El”. (1Juan 3:5)

El corazón de Jesús fue pacifico, los discípulos se preocuparon por la necesidad de alimentar a miles, pero Jesús no. Agradeció a Dios por el problema.

Los discípulos gritaron por miedo a la tempestad pero Jesús no. El dormía.

Pedro saco su espada para enfrentar a los soldados, pero Jesús levantó su mano para sanar. Su corazón tenia paz.
Jesús se rehusó a dejarse llevar por la venganza.

También rehúso dejarse llevar por nada que no fuera su llamamiento.

Este es el momento de decirle Jesús..!! Yo quiero tener un corazón como el tuyo.

El Amor de un Padre

Predica 10-05-2009

La Eutanasia (Material Realizado Por: Alumnos del IBRP)