Por: Diego Díaz
Luc. 10:41 Respondiendo Jesús, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas.
El afan y la ansiedad, hace que estemos turbados, por muchas cosas, como dice este versiculo.
¿Que es lo que te espera...? Una casa, un auto..?.ya habras escuchado mensajes como este. Lo que te espera es una vida eterna. Esto buscá y seguí; buscá y seguí lo eterno.
¿Estas hambriento por Dios, a tal punto que lo que digan los demas y las circunstancias adversas no te importen.?
No hablo de un entusiasmo, hablo de hambre por su presencia.
¿Perseguis su Presencia?
Nuestro problema es que todavia no hemos estado hambrientos realmente.
El Esp.Santo dice: Yo Quiero ser tu Dios...El quiere ser el unico en tu vida.
Permitimos que otras cosas satisfagan temporalmente nuestras vidas. Venimos a Dios semana tras semana, año tras año, solo para llenar pequeños espacios vacios.
Les digo que Dios esta cansado de estar en segundo lugar en nosotros.
Todo lo que hacemos debe brotar de su presencia.
Nuestra principal motivacion deberia ser: Lo hacemos porque esta en el corazón de Dios.
Permiti que tu corazón sea quebrantado por el Esp.Santo.
Es tiempo de dejar de mirar y hacer lo que acostumbramos.
El Señor debe ser nuestro mayor y primer hambre.
¿Viste personas realmente hambrientas? ¿Ese es el hambre que tenes por el pan de El?
Necesitamos estar tan hambrientos por Dios, que olvidemos literalmente nuestros modos.
- Una mujer tan hambrienta por ver a Jesús que se hizo lugar entre la multitud y toco su manto.
- Una mujer cananea se mantuvo rogando a Jesús que librara a su hija que era atormentada por demonios. (Mt.115:22-28)
- Aunque Jesús le dijo: no esta bien tomar el pan de los hijos y darselo a los perrillos; ella insistio. Fue tan agresiva, tan violenta, tan hambrienta que contesto; si señor pero aún los perillos comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos.
- El Esp.Santo nos esta motivando a ser obsesivos por el pan de su presencia.
Su rostro deberia ser nuestro mayor enfoque.
Esperamos que puedas recibir en este momento hambre por su Pan divino...
