martes, 29 de septiembre de 2009

Las cosas no son lo que parecen

Editada por: Diego Díaz (PA. de la UAD)


Dos ángeles que viajaban pararon a pasar la noche en el hogar de una familia rica. La familia era grosera y rechazo la estancia de los ángeles en el cuarto de huéspedes de la mansión. En su lugar, los ángeles fueron hospedados en un espacio frío del sótano. Hicieron su cama en el suelo duro, entonces, el ángel mas viejo vio un agujero en la pared y lo reparó. Cuando el ángel más joven le preguntó por qué lo hizo, el ángel viejo le contestó que "las cosas no son siempre lo que parecen".
La noche siguiente, los ángeles se hospedaron en un hogar muy pobre, pero el granjero y su esposa eran muy hospitalarios. Después de compartir el poco alimento que tenían, los esposos dejaron dormir a los ángeles en la cama de ellos para que estuvieran cómodos el resto de la noche.
Cuando el sol salió a la mañana siguiente los ángeles encontraron al granjero y a su esposa hechos pedazos: su única vaca, de la cual obtenían dinero por su leche, posaba muerta en el campo. El ángel joven se molestó y le preguntó al ángel viejo por qué dejó que esto sucediera. El primer hombre tenía todo y le ayudaste, la segunda familia tenía muy poco y estaban dispuestos a compartir todo y dejaste morir a su única vaca. "Las cosas no siempre son lo que aparentan" le contestó el viejo ángel.
Cuando permanecíamos en el sótano de la mansión, noté que había oro en ese agujero de la pared. Puesto que el propietario era tan obsesionado, avaro y poco dispuesto a compartir su buena fortuna, selle la pared para que el jamás lo encuentre.
Entonces, ayer en la noche cuando nos dormimos en la cama de los granjeros, el ángel de la muerte vino por su esposa. Le di la vaca en lugar de ella.

"Las cosas no son siempre lo que parecen". Esto es a veces exactamente lo que sucede cuando las cosas no resultan de la manera que esperamos. Si tienes fe, necesitas confiar en ese resultado y esta será tu única ventaja. Puede ser que no lo sepas hasta tiempo más adelante.
La mayor parte de las veces, no entendemos porque las cosas no se dan de la manera que esperamos, para entender el porque, leamos los siguientes textos.


Texto:

Pro 3:5 Fíate de Jehová de todo tu corazón,
Y no te apoyes en tu propia prudencia.
6 Reconócelo en todos tus caminos,
Y él enderezará tus veredas.
7 No seas sabio en tu propia opinión;
Teme a Jehová, y apártate del mal;
8 Porque será medicina a tu cuerpo,
Y refrigerio para tus huesos.


Pro 3:21 Hijo mío, no se aparten estas cosas de tus ojos;
Guarda la ley y el consejo,
22 Y serán vida a tu alma,
Y gracia a tu cuello.
23 Entonces andarás por tu camino confiadamente,
Y tu pie no tropezará.
24 Cuando te acuestes, no tendrás temor,
Sino que te acostarás, y tu sueño será grato.
25 No tendrás temor de pavor repentino,
Ni de la ruina de los impíos cuando viniere,
26 Porque Jehová será tu confianza,
Y él preservará tu pie de quedar preso.



Bosquejo:

Siempre creemos que sabemos como vivir y manejarnos en la vida, pero viendo los siguientes puntos notaremos que él es el Señor de nuestra vida.


I. No apoyarnos en nuestros pensamientos.
II. Reconocer que es Señor en todas las áreas.
III. Retengamos su consejo.
IV. Guardemos su Palabra.
V. Gracia a tu cuello.
VI. Dormirás confiado.
VII. Tu pie no tropezara.
VIII. El es tu confianza.
IX. Te librara de esclavitud.



Conclusión:

Retengamos la sana sabiduría y discreción; entonces andaremos seguros en sus caminos. La vida natural y todo lo que a ella le corresponde, estará bajo la protección de la providencia de Dios; la vida espiritual y todos sus intereses, bajo la protección de su gracia, de modo que seremos resguardados

El Amor de un Padre

Predica 10-05-2009

La Eutanasia (Material Realizado Por: Alumnos del IBRP)